Obra
Autor

Constant

Año

1954

Técnica

Metacrilato, aluminio y hierro

Año de adquisición

2009

Tipo de objeto

Escultura

Dimensiones

76 x 73 x 48 cm (alto x ancho x fondo)

Créditos

Colección MACBA

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En 1956 Constant empezó a trabajar en New Babylon, un proyecto arquitectónico para una sociedad futura. Después de la Segunda Guerra Mundial, cuando las ciudades de toda Europa estaban siendo reconstruidas, Constant desarrolló una serie de prototipos para la ciudad utópica. Tras abandonar la pintura, se centró en desarrollar una ciudad situacionista. Constant sostuvo que el funcionalismo racional y monótono utilizado entonces limitaría la vida libre y creativa. Empezó a diseñar estructuras arquitectónicas prospectivas. New Babylon se materializaba en una serie de maquetas extremadamente detalladas, en dibujos, grabados, acuarelas, litografías, mapas topológicos, collages, dibujos arquitectónicos y fotomontajes, así como en manifiestos, ensayos, conferencias y películas. «¿Qué es realmente New Babylon?» escribió Constant en 1966. «¿Es una utopía social?¿Un diseño arquitectónico urbano? ¿Una visión artística?¿Una revolución cultural?¿Una conquista tecnológica?¿Una solución a los problemas prácticos de la era industrial?». Y se contestó a sí mismo: «Cada una de estas cuestiones toca un aspecto de New Babylon». El proyecto preveía una sociedad donde la arquitectura tradicional, así como las instituciones sociales construidas, se habrían desintegrado. Todas las razones para la agresividad habrían sido eliminadas y la ciudad a construir estaría pensada para una sociedad de personas creativas liberadas del trabajo cotidiano atrofiante, una urbe construida para una nueva especie: el «Homo Ludens», el hombre lúdico.

Una ciudad nómada, New Babylon, consistía en una amplia red de espacios interiores de diversos niveles que se propagaría para cubrir, eventualmente, el planeta. Estos espacios interconectados, llamados sectores, tendrían múltiples pisos con suelos transparentes, sostenidos en el aire por altas columnas de diseño variable. Los vehículos se concentraban en el primer nivel y el tráfico aéreo aterrizaba en los tejados, mientras que los habitantes se dispersaban a pie por interiores laberínticos, de ambientes que se reconstruían continuamente. Cada aspecto del entorno podía ser controlado y reconfigurado de forma espontánea. Se trataba de una urbe lúdica donde los neobabilonios serían libres para crear y recrear la ciudad a su gusto.
Sin embargo, al principio de los años setenta, Constant se dio cuenta que dar rienda suelta al id (ello) freudiano no llevaría al paraíso. Dos décadas después de embarcarse en la visión de una ciudad volcada en el placer, percibió el lado oscuro del id (ello) desatado. Antes de abandonar el proyecto, en sus últimas obras sobre New Babylon, dibuja un Apocalipsis en negro y rojo: locura, esclavitud, deshumanización, las consecuencias distópicas del deseo sin freno.

Aunque Constant consideró su proyecto desde el umbral de la muerte del arte y la arquitectura, su obra visionaria ha tenido una importante influencia en generaciones posteriores de arquitectos, provocando intensos debates en las escuelas de arquitectura y bellas artes sobre el futuro papel del arquitecto. Su obra prefigura proyectos de Zaha Hadid, Frank O. Gehry, Rem Koolhaas, Philippe Starck, Nigel Coates, Greg Lynn y otros arquitectos que imbuyen en sus singulares edificios el impacto emocional de la experiencia urbana. Buceando en el futuro, el proyecto de Constant previó incluso la red ciberespacial que hoy rodea el mundo.

Otras obras

Boothworks

Garrido, Cristina

La distancia correcta

Palacín, Mabel

Sin título

Sevilla, Soledad